- Ordeig Corsini, Manuel (Author)
San Cono
San Cono nació en el Siglo XII en un pueblo de la provincia de Salerno, Italia, llamado Teggiano. Sus padres suspiraban el hijo que se hacia esperar. La leyenda cuenta que una noche los esposos tuvieron el mismo sueño. Del seno de su madre (Igniva) brotaban llamaradas. Un sacerdote interpretó la visión anticipando a la madre que a pesar de su avanza da edad, tendría un hijo que sería la gloria de su pueblo. “Algo perfecto”, tal es el significado de “Cono”. Tempranamente decidió solicitar el ingreso al monasterio benedictino de San Nicolás, pero el Superior, no lo aceptó. Sin embargo, Cono ardía de impaciencia por incorporarse al monasterio. Tanto es así que se presenta en uno de una ciudad más alejada, de incógnito. Sus padres lo siguen y lo reclaman y él se esconde en el horno de pan del monasterio de Sta. María de Cadossa. Salvandose por verdadero milagro de morir quemado, sus padres aceptan su llamada vocacional. El joven benedictino fray Cono, no cesa de orar y trabajar en las labores más humildes: cocina, barre, atiende la huerta. Un atardecer de verano aquel joven monje recibe un mensaje: “Esta noche Dios te llamará”. Así sucedió, en la madrugada del 3 de junio de un año de comienzos del siglo XII San Cono moría serenamente. El 27 de setiembre de 1261, los dos pueblos cercanos se disputaban los restos del monje benedictino. Finalmente deciden ponerle en un carro y dejar que los bueyes decidan el camino. El rumbo fue el pueblo de Teggiano natal y ante la iglesia de su infancia los bueyes se echaron. Canonizado, en 1871 por el Papa Pio IX. Fueron los emigrantes teggianenses quienes llevaron su culto a varias regiones del mundo. Hoy se lo venera, además que en Teggiano y Florida, también en Nueva Orleans (Estados Unidos) en Australia y en Argentina.
El 3 de junio se celebra la Fiesta del Santo, en un marco religioso-popular, que convierte al Templo y sus alrrededores en una verdadera romería. Por la mañana el Obispo de la Diócesis celebra la Eucaristía y en tempranas horas de la tarde se realiza la Procesión. Siguiendo en estas Celebraciones el programa realizado casi desde el comienzo de las festividades. En esta manifestación religiosa participan los devotos más dispares. La popularidad de este santo es debida a que es considera el patrono de los “quinieleros” y es invocado para tener suerte en todos los juegos de azar y en forma más general para conseguir dinero.
San Cono es conocido por los aficionados a las loterías como el «Padre de las Cábalas». Hay creencias de que este Santo ayuda a la gente humilde, sobre todo cuando esta se encuentra en un aprieto económico. Según la leyenda, de acuerdo como sea el problema, el le envía el favor; si es pequeño, le proporciona una pequeña cantidad para que resuelva su problema; y si es grande, la ayuda será mayor.
Oraciones a San Cono (Para Ganar La Lotería)
- Keller, Timothy (Author)
San Cono, haz que la suerte me beneficie, que los misteriosos hilos del azar se tejan para mi bien, que con mi jugada alcance los medios materiales que necesito para realizar mis sueños. Gracias San Cono por darme tu bendición y regalarme la alegría de alcanzar lo que deseo.» Luego, al llegar a su casa, préndale una vela blanca y colóquele como ofrenda un ramito de perejil.
Dios clemente y misericordioso,
en tu Omnipotente Trinidad yo confío y espero
y por la mediación de San Cono
te pido salud, trabajo y unión de mi familia.
Señor, yo no quiero pecar
pidiéndote suerte en el azar,
pero cuando tú quieres nos puedes tender
por medio de San Cono una mano
para ganar una apuesta:
Si es el 03 porque es el día de su muerte;
si es el 7 y al 07 porque es el número
que suman las letras del nombre de San Cono;
si es el 18 es por la edad que falleció;
si es el 11 porque es el número
de su Iglesia en Florida (Uruguay);
si es el 60 es porque cuando trajeron su imagen de
Italia
en una de sus sandalias estaba ese número;
si es el 72 es porque es la terminación del año
en que fue canonizado en Roma;
si es el 85 es la terminación del año
en que se inauguró su Iglesia.
Señor, si soy merecedor de tu gracia,
por medio de San Cono concédemela.
Amén
Oh ángel candidísimo de pureza
y serafín de santa caridad gloriosísimo SAN CONO, nosotros, humildes devotos vuestros,
os presentamos el efecto mas sincero
de nuestro corazón.
Nos congratulamos de la gloria singular
de que gozáis en el cielo;
nos alegramos de los especialísimos dones
con que os previno, acompaño y consumo la divina gracia
y rendimiento las mas vivas gracias al SUPREMO dispensador de todo bien.
Vos, que anunciado milagrosamente,
nacisteis para ser ejemplo de perfecta caridad.
Vos, que al candor de la inocencia bautismal
y angelical pureza supisteis unir los rigores
de las mas austeras penitencias.
Vos, que en la flor de los años buscasteis la soledad
del claustro para consagraros y mejor servir a Dios.
Vos, que en tan corta vida supisteis Llegar a la cumbre
de la perfección y Santidad.
Vos, finalmente, que después de la muerte hicisteis brillar vuestro poder obrando milagros estupendos;
Mirad benignamente desde el cielo
a cuantos a Vos acuden
Ilenos de confianza en vuestro patrocinio.
Que vuestra devoción acredite a nosotros
la imitación de vuestras virtudes,
especialmente en fe viva, una eficaz esperanza
y una inflamada caridad hacia nuestros Dios y señor
y su Inmaculada Madre María,
para que amándose como vos los amasteis,
podamos en el cielo y en compañía Vuestra
bendecir y alabar la divina misericordia.
Amen.
Si la situación es desesperada también puedes rezar a Santa Rita Patrona de las causas desesperadas